lunes, 14 de julio de 2014

Plumaroja 2.0:Encantado de que nos conozcamos (4). Polinizando.

Encantado de que nos conozcamos (4). Polinizando.
"...para la leche que da la vaca que se la coma el vaquero..."

Así cantaba Carlos Puebla, en aquel inolvidable tiempo. Han pasado unos cuantos años y ha llovido lo suyo, no siempre para bien.

Desde entonces, hemos tenido -han tenido- tiempo de tirar, por la borda, ilusiones proyectos y principios. No pocas vidas se han ido en ello, y un trozo d...e la civilización, que caminaba hacia delante. Al menos eso se exigía. Todo ello ha sido en pleno apogeo de nuestra "llegada al mundo de las democracias", allá a finales de los años setenta del pasado siglo. Todo ello -casi todo- por el costado de estribor, aunque no siempre mirando a proa. Es lo que tiene el dejar que los grumetes tomen el timón...

El timón mayor, en España, es el psoe -no merece ni una mayúscula-.

No se conoce otro timo con tal capacidad de encantarse a si mismo. Ahora, se encuentran con que, lo que sale en el boletín oficial del estado, no lo leen ni los que tienen obligación y lo que publicitan los medios cada vez convence a menos gente.

Por lo demás, la derecha está encantada de que, este primer retoque en su fachada, quedase como ha quedado. Sin populismos que, ya se sabe, los carga el diablo y los disparan las Susanas Díaz y las Esperanzas Aguirre. Cada una a lo suyo y las dos en lo de todos, coletas y otros rojos, a granel, incluidos.

Ahora no hay que pasar por los laboratorios, para revelar. La tecnología ha puesto en manos de todos la capacidad de retratar y retratarse, digitalmente. Ya es hora de poner al psoe, y a toda su militancia, en el lugar que usan, por el que circulan y por donde, y con quien, suelen encontrarse. En Andalucía también es tiempo de estirar la cuerda y soltarla de golpe, para que la derecha se caiga de culo. Toda la derecha...

El resto de los mortales estamos preocupados por el mundo de las flores y las abejas. O sea, el de todos. El cambio climático nos ha hecho adictos a mirar alrededor para ver lo que sucede y, los que ya estábamos acostumbrados, miramos con preocupación aquello que afecta a los "bichos y los vegetales". Si los humanos -bichos de entre dos y doscientos kgs.- tenemos problemas con "el tiempo"... ¿qué no tendrán -sufrirán- las abejas y las flores?

La polinización es clave en la historia del Planeta, y en su devenir. En la colmena humana, la reina se ha vuelto loca y ha puesto a las guerreras a comer obreras. Mal asunto para los frutos y para la colmena.

En la política, es clave iniciar la "polinización", ciudadano a ciudadano, porque los medios están en manos de quienes están.

Llegó la hora de salir de las instituciones y polinizar pueblo a pueblo, toda España, para explicar el nuevo proyecto para el país, sus naciones y sus ciudadan@s.

Un proyecto en el que hay que implicar a toda la sociedad que no está encantada de haberlos conocido, y a toda la izquierda social y política. ERC, BILDU y BNG incluidos.

La movilización debe ser absoluta, de arriba abajo y viceversa. Estamos en la batalla más decisiva de la guerra que nos han declarado los ricos.

Polinizar es la clave.

Movilizar, la respuesta.

...continuará...

lunes, 23 de enero de 2012

¿Salirse del euro, la solución?

Desde prestigiosas tribunas, se hacen la pregunta y, poniendo sobre el tapete el ejemplo argentino, no desdeñan la posibilidad.

Mi respuesta, antes de meditarla demasiado, es decir que no. Y se me ocurren unas cuantas razones. La primera de ellas es que se renunciaría a una Europa distinta a la que está construyendo la derecha. En todo caso, no es algo difícil de desmontar si las urnas reflejan intereses distintos a las corrientes que hoy dominan. Es de esperar la reacción de los electorados en Francia y Alemania, avalados en propuestas más sociales de la izquierda. Es de suponer la evolución de la izquierda, allí en donde ha sido desplazada del poder.

La segunda razón para el rechazo de la idea es que, salirse del euro -plantearlo- podría ser un reclamo electoral, dados los agravios que el ciudadano de a pié adjudica a la moneda única, pero eso no nos "libra del mal". El mal es el dominio de la derecha. En los gobiernos -casi todos están en su poder-, en los medios, en la dinámica social.

La tercera razón es que no hay que dar saltos en el vacío, y menos, cuando la sociedad se está contrayendo. Al contrario. Hay que encender una luz al final del túnel.

La cuarta es que, con la derecha en plan exhibición -grotesca- tendríamos los mismos problemas fuera del euro, que dentro de la idea europea y, de paso, les ahorramos, al resto de izquierda continental, el bochorno.

El plan de la derecha es afianzar sus mecanismos de dominación social. Esto es; seguir manteniendo el estatus -y el poder- a costa de salarios y coberturas sociales -según ellos- más competitivos. Y la receta tiene dos caminos básicos: recortes de derechos y re-asignación de recursos -recortados-. Es decir: estado más corto y barato, economía más competitiva. Ambos a la baja.

Uno de los efectos de la salida del euro sería re-situar los salarios y "mejorar la competitividad". Eso se pretende por el camino de la estanflación, que ya hemos comenzado. Y mal, por no variar la costumbre. Los que tiene que bajar son los salarios obscenos -y otras coberturas- y mejorar los básicos, como poco, con lo que se debe quitar a los más altos. Esta mejora en los salarios básicos sería recuperada mediante el aumento del consumo, claramente. La segunda vía es la de una reforma fiscal más social, sin ir más lejos como las que se han dado países tan poco sospechosos de comunistas, como Suecia, Noruega, etc., y eso es posible dentro del euro, también.

El problema de España no es salarial sino, el haber dedicado tiempo y recursos a actividades que no mejoran la plusvalía social. Hemos errado en los objetivos y empleado herramientas para el estatus político   -televisiones autonómicas, aeropuertos, estructuras administrativo-políticas sobre-dimensionadas, obras megalónomas, innumerables recursos públicos para el enriquecimiento de empresas (a comisión) etc. etc.- y no para el desarrollo social, por medio de las posibilidades de la ciencia industrial, de la medicina, de la ecología etc. Entre ellas, la investigación para desarrollos industriales que den respuestas al cambio climático, sin ir más lejos.

Por el camino son imprescindibles -la caja no da para más- los recortes. Yo también lo creo. Lo que no me creo es que la derecha recorte de donde debe, sino de donde más beneficio le saca. Y así lo está haciendo. Sanidad y enseñanza, para la derecha, son nichos de negocio fundamental. Lo han sido siempre. Además, en la sanidad privada, hay un nido, grande, de fraude fiscal, vergonzoso y... vergonzante.


El euro, como expresión de una Europa con voz y soporte propios, al margen de los dominios del dólar, es un sueño alcanzable y, se ha caminado mucho como para desechar el esfuerzo. En todas las grandes conquistas, la lucha ha conocido ligeros -o grandes- retrocesos, dado que, las resistencias al avance, son muchas y poderosas. No se puede empezar una guerra que no se va a ganar. Se pueden perder algunas batallas, pero es imprescindible tener claros los objetivos. Me puedo imaginar que todo esto lo sabían quienes empezaron con la idea de la Europa Social y, a mí entender, no hay razones, sobre la mesa, para pensar lo contrario.

Imagínense, europeos, que idioma estaríamos hablando, si los infantes de marina que desembarcaron allá en las playas de Omaha, Utah, Juno y Sword, hubiesen creído que los acantilados eran inalcanzables. La noche más larga. 

El euro, el significado para la izquierda, debe ser un símbolo. La Europa social, la salida del túnel. Manos a la obra.

jueves, 19 de enero de 2012

Cabos sueltos

Revolotean por mentes y páginas, en la red, algunas ideas que, si no se matizan, acaban como seña de identidad de quienes "pasamos" por ahí. No me parece justo.

Todavía hay quienes piensan que la situación económica y social en España es responsabilidad única del anterior presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Esto tiene varias justificaciones.

El oportunismo del rival político. El análisis del que defiende la alternativa. La frustración de quienes han perdido, poco, o mucho. La frustración de quienes esperaban más. La desleatad de algunos. Y, también, el análisis que hacen quienes defienden otro tipo de política de izquierda. 

La mayoría de estos análisis tienen un componente temporal. Pero también los hay que llegan al calificativo de "terrorismo intelectual" que, son aquellos que se hacen para justificar el salario del miedo. 

Es una pena comprobar que, en donde debería surgir un rechazo, por higiene, también mental, caigan algunos en el hecho de bendecir auténticas aberraciones analíticas. Hay que decir... que no es eso... que para salir de auténticos atolladeros no basta con soltar la lengua. Hay que hacer gimnasia.. y mucha. Empezando por la de las neuronas.

Oigo muy poco, por estos lares, relatar el comienzo de la III Guerra Mundial, la que aún liberamos los de siempre, contra el Imperio de Mal encabezado por los Goldman Sachs, Lehman Brothers, etc. etc. que ha venido, no solo a derrotar al gobierno de turno en España, sino que lo hace con el de Italia, Portugal, Irlanda, Grecia, Islandia y deja muy tocados a los del resto de la Unión Europea, incluido Francia y con una Alemania que ya pone las barbas de Merkel, a remojo. 


Esto no se dice, porque sería como reconocer que estamos viviendo y, la mayoría muy convencidos, en un modelo social, en el que domiman las ideas burguesas, que tiene previsto igualar, a la baja, las condiciones sociales y laborales en todo El Planeta. Los partidos que defienden a la burguesía dominante no necesitan explicarse. Están para lo que están. De hecho, los ejércitos "invasores" han dejado en todos éstos países a auténticos pro-cónsules del imperio. He de reconocer que, en el caso de España, se han consultado a la ciudadanía y han respondido, mayoritariamente, los "espabilados".

Claro que no se consuela el que no quiere. Basta con mirar a la India o a la China, auténticos "milagros económicos", para saber que es mejor pensar lo que se dice.


Quienes carguen las tintas contra Zapatero tiene que tener, como poco, una idea distinta, de las estructura y el funcionamiento del Partido Socialista, que también las hay. Y reconocer, de paso, que los actuales partidos políticos no tienen -casi, casi, por que no quieren- las herramientas necesarias para hacer políticas muy distantes de las que hizo Zapatero. Me explico.

La mayor parte de las medidas que hubiesen frenado los efectos de la agresión ultracapitalista chocan con la normativa vigente en España y en Europa. Estos son los marcos jurídico políticos en los que nos movemos, por decisión propia.

En España se necesita del voto del Partido Popular para hacer modificaciones constitucionales. No hay que explicar que... na nai de la china. Recordemos solo como ejemplo lo de educación para la ciudadanía, la renovación de los cargos en la justicia y tribunales, la propia ley de educación que propuso Gabilondo, el España se rompe, el gobierno a los piés de Eta, lo de Camps, lo de Matas, el colchón de corrupción sobre el que flota el Partido Popular, etc. etc. etc. La guinda es el proceso a Garzón.

En España se necesita que, quienes componen el "cuerpo de cargos públicos y responsables políticos en el partido socialista" sean, como poco, socialdemócratas... y además, que se lo crean y lo parezca. Estamos un tanto lejos.

En España se necesita que la "otra izquierda" deje el canivalismo y emplee las energías en buscar ideas y programas, a largo plazo, más digeribles por los menos audaces.  Hay que evolucionar... que ya lo dijo Darwin. ¡¡¡Que no nos enteramos!!! Puedo llegar a entender lo de la monarquía... lo que no entiendo es lo del sectarismo. Es rancio y, sobre todo, un virus de desencanto, que favorece el alejamiento de la política. Justo lo que incentiva la derecha en todos los "medios".

Cuando las arcas del estado, no hablo ya de las de las comunidades autónomas y ayuntamientos, descubren que no hay limosna para tanto pobre -solemne- tienen que comenzar los recortes. Es de cajón. Cada cierto tiempo hay que pagar facturas. De lo contrario nos cortan la luz, el gas, nos echan de casa, etc. etc. Al Estado también. A las Comunidades y ayuntamientos igual. 

A Zapatero no le quedó más remedio que, a regañadientes, y soportando a "los herederos"-digo la derecha que ahora manda- realizar recortes y cumplir con los mínimos para mantener el país a flote, pero con un enorme costo social. Ha cometido el error de no calibrar totalmente y, antes, el efecto de la crisis sobre el crédito y el empleo. No ha hecho una reforma fiscal, necesaria, que no podría sacar adelante vistos los buitres que reclamaban su parte del cadáver. Eso no esconde que la cota más alta de empleo y cobertura social en la historia de este país ha sido en los años de su mandato. En el año 2007 España era el país que la juventud europea prefería para vivir y trabajar. Si a alguien le cuesta "tragar esto", no es porque deba operarse de la garganta. Hay que poner algo debajo de la gorra.

En la próxima entrega volveremos sobre la idea de la salida del euro.

miércoles, 18 de enero de 2012

Garzón, un pulso a la soberanía popular.

Tengo derecho a no molestar, pero no lo ejerzo... hace, ya, tiempo. 

Ya está enterrado el Sr. Fraga y seguro que descansando. Quienes no descansan son los que pretenden tener la impunidad que la dictadura propiciaba a los corruptos y a la extrema derecha. 

Se intenta, desde la red, hacer sentir la indignación que nos produce a muchos lo que prestigiosos juristas proclaman a los cuatro vientos: La justicia tiene el deber de ser -y parecer- proporcional, equitativa. 

En la misma red aparecen, como ante cualquier otra noticia o comentario que sea sospechoso de buscar las tramas de la política o la economía corruptas, gente que, con más o menos pulcritud tratan de esconder la verdad del proceso a Garzón. Que si el artículo tal o el párrafo cual. Evidentemente, verdades troceadas a conveniencia. Hay sentencias, que sientan jurisprudencia, que avalan las escuchas en casos como el que nos ocupa y preocupa. No hay nada más que decir. Esto lo sabe cualquier estudiante de derecho, de los que asisten a las clases.

¿Entonces, cual es el empeño de algunas voces "autorizadas" empeñadas en defender lo indefendible?

La respuesta es: la causa.

No se está juzgando a Garzón por lo que hacía. A Garzón lo quieren apartar de su carrera judicial para que no puede llegar a donde pretendía.

Si uno se sienta al lado de alguien que fuma, es muy probable que termine respirando humo. Si alguien protege a corruptos o delincuentes terminará con mierda sobre su tejado. 

El Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Supremo se están colocando al lado de fumadores. Y el reto en el que, no ingenuamente se han metido, será tirar del hilo que le han sacado a Garzón.  

Garzón quería destapar la alfombra que esconde las alcantarillas del Partido Popular. Tal como hizo con Eta o con los del narcotráfico. Y le han aplicado la misma medicina que Bush aplicó a Sadán Hussein: Mientras me sirvas, adelante; cuando estorbes, te cepillo. Allí con tanques, aquí, con artículos a conveniencia.

Se han metido en un charco, porque han preferido eso a, quizás, tener que iniciar un procedimiento para inhabilitar a la cúpula del Partido Popular, por corrupción. Tiene tela. Lo sabe muchísima gente y lo sospechamos, la mayoría.

Federico Trillo ya anticipó la caída de Garzón hace unos dos años. Sabe de los aliados que tiene en "la justicia".

Y esa es la pelota que tenemos los demócratas en nuestro tejado. Les hemos prestado la soberanía popular, para su buen cultivo, y nos devuelven esta bazofia.

Es necesaria una reforma integral de la justicia que, entre otras cosas, aporte un control democrático           -elección por los ciudadanos- de los componentes de los tribunales. Y por encima de partidos, e incluso gobiernos, el referendum en cosas importantes. Así se ejercerá la soberanía popular para fines correctos. 

Garzón solo hay uno. Delincuentes, más de los que parece.

martes, 17 de enero de 2012

El último día

me alcanzarán los días
-seguramente- 
para hacerme igual
a los que no he sido

Ézaro Costa

Este pequeño poema habla del día en que nos alcanza el final. El día en que, todos, nos socializamos, definitivamente. El día de los "buenos". 

El tiempo que transcurre, entre el nacimiento y el día de los buenos, es eso que se llama experiencia. Hay quienes dicen que es como una peineta que llega cuando queda poco, o ningún, pelo. 
Tener sesenta y un años de experiencia es algo que te da la posibilidad de conocer la verdad sobre determinadas leyendas, más o menos urbanas. Por ejemplo; no hace falta que te digan lo bueno e importante que ha sido el Sr. Fraga Iribarne porque ya lo hemos "disfrutado o sufrido", como es el caso. 
Pero hay otro perfil del tal Sr. que no será  demasiado explorado en los noticieros o los comentarios en la red.
El Sr. Fraga tenía vocación exclusivista. Pretendía, trabajaba, y ansiaba ser de los conductores de la historia que, como bien se sabe, es querencia de muchos y territorio de pocos. Así era Él, aunque era más cosas. 

La imagen que más asocio al tal Sr. es la de las jaulas de los grises que embestían a los que pedíamos amnistía y libertad por las calles de Ferrol. En todo caso nada que no se supiese. Es verdad que la extrema derecha hubiese tenido más presencia en la transición si el papel de esta persona fuese distinto. Hay que reconocer que su "alianza popular" restó protagonismo a Blas Piñar y Cía. Es justo reconocerlo y así lo hago.

Hace muy pocos días -los días- alcanzaron a Isaac Díaz Pardo. Galego ilustre. Boa persoa. Este no necesitó llegar al último para que se le reconozca. No tenía vocación exclusivista. Su pasión era la gente, su tierra, su cultura. Él era soporte y, su trono, la generosidad. Quería parecerse a los de abajo y, en todo caso, a los inteligentes.

No hay respeto en "los medios". Son una mentira metida dentro de otra mentira más grande.

Los homenajes deben hacerse a los que no necesitan llegar al último día para ser buenos.

Hoy, diecisiete de enero, comienza el juicio a Garzón. Una venganza de la "justicia" -espoleada por el PP- para castigar la osadía del magistrado en la persecución de la delincuencia política y económica, cuestiones ambas que colocan al partido del gobierno unos escalones por debajo de la decencia. Es posible que Garzón utilizase atajos. Es necesario crear otras normas -o leyes- que impidan a los delincuentes escudarse en tales garantías, si la pruebas demuestran su culpabilidad. 

Los delincuentes tienen más garantías de las que merecen. Hay que revisarlas. Pero, lo más importante de esta "lección a Garzón" y aviso a navegantes es, sin duda alguna, que los jueces deben pasar por las urnas. Los ciudadanos tendremos que conquistar -en el camino de la soberanía popular- el derecho a valorar su labor y, cada cuatro años, decidir quienes pueden seguir en los tribunales o bien pasar a otra función.


Ya reconoce el Sr. Rajoy que el gobierno no lo puede todo. Nada que reprocharle. Ya lo sabíamos. Los que no lo saben son algunos de los que le han votado.

Hay quienes necesitan llegar a los sesenta años para saber quién es quién. Algunos aprendimos algo antes porque las circunstancias -y el deber- nos empujaron. El país era gris y triste y nuestras ilusiones se parecían a las de Isaac. Pero, a cada ilusión que levanta el vuelo, hay una cuerda que tiende a amarrarla. En esa época, la de la ilusión por la democracia, Fraga era una cuerda.

Rajoy es -lo dice Él- heredero del Sr. Fraga. Otra cuerda que, para desgracia de la mayoría, tiene muchos votos y más diputados de los que le pertenecería si la Ley que regula el asunto fuese respetuosa con la soberanía popular. Otro problema a resolver.

En muy pocos días se ha desenmascarado, pero que nadie espere que se escandalice los que lo auparon a donde está. No seamos incautos. No desmerezcamos el alto grado de desfachatez que rige las expectativas democráticas de parte del "personal". 
¿No se sabía lo que había en la Comunidad Valenciana?  
¿Qué resulta de las encuestas de intención de voto que se hacen a menudo? 
¿Sobre qué valores quiere construir su futuro, la gente?

Que nadie ponga las expectativas de futuro, sobre la mesa, sin antes reconocer que es necesario reconstruir una mayoría social que crea en los valores que nos llevaron a conquistar este escaso territorio de libertad del que disfrutamos y, a la vista está, padecemos.

La renovación y mejora de la salud social vendrá si hay otra mayoría en las urnas. No caerán de la burra los que admiten este tipo de sociedad. Esperar por su regeneración es asegurarles su continuidad.

Encontrar fórmulas para un programa común de la izquierda no admite dilaciones. Es imprescindible, a los ojos de los que ya tenemos la peineta y poco pelo. 

viernes, 13 de enero de 2012

La derecha tiene un plan.

La derecha tiene un plan y la izquierda debería tomar nota.

Me gustaría recordar a IU que, el Partido Comunista de España, llegó tener casi el doble de diputados que los que actualmente tiene la coalición. También por aquel entonces la injusticia del redondeo y la circunscripción electoral -provincial y trasnochada- tenían el mismo efecto en la composición de las Cortes. Recuerdo asimismo que durante el mandato de Julio Anguita, al frente de la coalición, y de Aznar como presidente del gobierno central, se ensayaron algunas tácticas que beneficiaban a las dos fuerzas políticas interesadas -cada uno en su propio beneficio- en el debilitamiento del PSOE. Los resultados saltan a la vista. IU casi desaparece y el PSOE vuelve al poder.

Para que el PSOE volviese al poder no bastaba con que los electores castigasen planteamientos "cortos". Las mayores facilidades para que El PSOE volviese al poder las puso la propia derecha, con actitudes infames. Recordemos lo que les acompañó hasta unos días previos a las elecciones en donde cayó Aznar, con todo el equipaje.Guerra de Irak, atentados en Madrid, caso Prestige, etc., etc, etc.

Al Partido Socialista le recordaría que, hace bien poco, detentaba el gobierno del estado y algunos otros en comunidades autónomas y en muchos ayuntamientos. Algo mal habremos -habréis- hecho, que ha propiciado el negro panorama actual, digo yo.

Llevamos ya unos largos años en que la derecha es más inteligente que la izquierda. Lo demuestra la deriva social. En los años sesenta y setenta ser de derechas daba vergüenza, y muy pocos réditos.  La culpa de esta deriva social hay que apuntarla en el debe de la izquierda y en el nefasto papel de los medios de creación de opinión -y modismos- de que dispone, la derecha.

Lo de la derecha está más elaborado, tienen más medios -como siempre- y están bien asesorados, como nunca.

Entretanto la izquierda se conforma. Unos con ser más puros que el de al lado y, otros, en consonancia con derechizamiento social, en ser meros gestores del mundo capitalista y darle un cierto brillo a las propuestas de igualdad que no cuestionasen nunca el papel central del capitalismo rampante.

Consecuencia, la derecha acapara más poder que nunca, y millones de personas están a punto de entrar en las catacumbas. Unos por "nulidad económica surgida" y, otros, hartos de la inoperancia de la polítiquilla y de la dictadura de los mercados.

Al hacer esta crítica soy consciente del papel de la crisis en los resultados electorales, que lo tienen, sin duda alguna. Pero hay mucha más responsabilidad en la gestión, no solo de la crisis, sino en como se han empleado los presupuestos de los años de bonanza y los propios fondos europeos, que han sido ingentes.

A la hora de hacer un balance del estado, la primera imagen muestra un estado central mucho más adecuado a los tiempos que vivimos, en contraposición a unas autonomías en las que chirrían casi todos los ejes. Aquí está la mayor parte de las explicaciones a los males de nuestra economía. Volveré sobre el tema, porque es urgente.

Se están dando los primeros pasos, las primeras decisiones del gobierno entrante y a muchos no nos sorprenden. Ya conocimos al abuelo de la enfermedad y, al resto de la familia, también. Las más llamativas son, para mí, los ceses y los nombramientos. Ahí si, tenemos el ADN del PP. Por ser concretos; Garzón fuera. Policía fuera. Anticorrupción fuera. Ley de protección del litoral, fuera, etc. etc. etc. Barra libre, para "los suyos".

La derecha tiene un plan y, la izquierda, debería tomar nota. No hay que esperar a que la salida venga de presuntos revolcones electorales en Alemania o Francia y, aprovechar la corriente. Eso no es una ciencia exacta y, además, está por ver.

La izquierda no puede esperar a que los recortes den los suficientes recursos económicos para que la derecha los regale a los empresarios y contraten, aún sin necesidad, para bajar la cifra de desempleo a cuenta de gastar lo que se tiene que emplear en nuevas empresas, investigación y educación. Este es el plan de la derecha. Asegurarse la miopía social por una decena de años. Al tiempo.

miércoles, 11 de enero de 2012

¡Que pena!

Habría tenido que empezar a colocar, en el blog, las propuestas que denomino Legado Social. No lo haré, de momento, porque la derecha está por desgranar su "bomba de racimo" -sabremos más a partir de la elecciones andaluzas- y, la izquierda, sigue ensimismada.

He leído la ponencia marco del 38 congreso del PSOE y, aunque contiene un análisis cercano a la situación real de la sociedad, no entra a profundizar en ningún aspecto. Da la impresión de querer enseñar una imagen y luego taparla con propuestas cortas. Como el médico que te dice: "Tienes tal cosa, pero no pienso curártela".
Para ser más preciso lo definiría como: "Sabemos que la sociedad nos ha colocado en el punto de mira -a los partidos y los políticos- pero nosotros -los que vivimos del voto- os diremos hasta donde podréis llegar: A listas más abiertas y a la participación de los simpatizantes. Y... poco más. ¡Que pena!... no se enteran.

Hay dos errores, de gran calado, en la ponencia.

Primero, creer que la historia esperará por el partido socialista y, segundo, proteger los intereses profesionales bajo la capa de "partido de gobierno".

Ni lo uno, ni lo otro. Cuando una sociedad atisba una salida no espera por nadie. Véase lo que ha resultado de las elecciones en el País Vasco.

Llamar fundamentalistas de la democracia a quienes queremos una forma más social de entender la soberanía popular es, ni más ni menos, demostrar que se creen que las actuales reglas del juego son intocables y, lo peor, que ellos son los actores, los jueces y los beneficiarios.

Espero que el camino al congreso alumbre algún tipo de milagro. Que las discusiones fuercen un cambio en el partido socialista, a mejor. La sociedad necesita un partido socialista que pase por la depuradora, como los mejillones de la ría. Depurar ideas y aportar nuevas energías, con nombre y apellidos. Como poco deberían trazar una ruta corta que conduzca, a quienes llevan años en cargos, y no han aportado nada, a volver a la base.

Hay razones para una dimisión colectiva. La piden los cuatro millones y medios de votos perdidos y la gran mayoría de los que fuimos a votar contra la derecha. Creedme.